La medida de fuerza se lleva a cabo previamente al paro de 48 horas convocado por las regiones del norte, previsto para el 18 y 19 de febrero. De esta manera los campesinos acatan el paro indefinido convocado desde este miércoles y para lo cual se han instalado bloqueos en la salida a Chulucanas, Olmos, Ayabaca y Huancabamba en tanto otro grupo está bloqueando la salida de El Trébol.

Luego de una asamblea entre colectivos, comunidades y otras organizaciones campesinas se acató bloquear los tres puntos estratégicos de la Panamericana Sur sumándose al pedido por una Asamblea Constituyente, la renuncia de Dina Boluarte y que se vaya el Congreso. Circularon diversas versiones sobre la extensión de la medida. Algunas indicaban que los campesinos iban a permanecer en los tres puntos hasta las 14hs., pero otras señalaron que pernoctarían en el lugar a la espera de que lleguen más campesinos de Huancabamba para sumarse al paro.

La protesta se da en el marco de que el régimen golpista ha extendido por otros 30 días el Estado de Emergencia que suspende las libertades democráticas y da impunidad a las fuerzas represivas. El día martes, el gobierno de Boluarte señaló que los cortes de rutas y movilizaciones habían mermado significativamente y que el país estaba volviendo a la normalidad. Luego de semanas de represión que terminaron con la vida de 60 manifestantes, una campaña masiva que acusó a las protestas de "terroristas", y direcciones del movimiento que fueron incapaces de centralizar y organizar la lucha, Boluarte y sus secuaces tratan de mostrarse fuertes y en control de la situación.

No obstante, el país está lejos de volver a la "normalidad" que pretenden los golpistas. El ilegítimo Congreso, cómplice del golpe, no logra ponerse de acuerdo en una fecha para futuras elecciones debido a sus rencillas internas; en las regiones del sur se mantienen varias arterias bloqueadas y otras protestas a las que se suma este paro en el norte del país.